Motorola tiene casi la mitad del mercado argentino a fuerza de un catálogo imponente y precios competitivos. Probamos hace poco tres equipos y, en esta ocasión, a sus 3 hermanos “menores”.

Motorola (o Lenovo, empresa china que es dueña desde hace tiempo) realmente se tomó el 2022 muy en serio. Viene tirando celulares para todos los segmentos y, luego de revisar lo mejorcito de la gama hace un tiempo en nuestra página, ahora toca una suerte de “hermanitos menores”. El Edge 30 (hermanito del 30 Pro) junto al G82, un “gama media” —para los que no quieren saltar al G200—, y el G22 (el más accesible del momento pero que no resigna prestaciones).

Primero veamos las características técnicas de los 3 muchachos como para tener en mente de que se trata cada dispositivo

50 MP, f/2.2, 118˚ (ultrawide), 1/2.76″, 0.64µm, PDAF

Vayamos punto por punto a ver a cada uno de los exponentes.

Similitudes en todos los casos. El G22 es grande, se lo siente así en la mano por dimensiones y por peso entendible para una pantalla de 6.5 pulgadas con una batería de 5000mAh.

El G82 también es grande por los 6.6 pulgadas de pantalla y la misma batería, pero casualmente es más liviano que la gama baja.

Y si el Edge 30 Pro era un atleta bien entrenado, el 30 a secas es aún más delgado y liviano. Vidrio en ambas caras y marco plástico que no lo parece. Se lo nota largo pero, al ser el más delgado de los tres, se lo siente muy cómodo en el mano, gracias también a su bajo peso contenido. En otras palabras, es un dechado de ergonomía. Está claro que es un diseño muy bien ajustado y cómodo para cualquier ocasión.

Otra cosa positiva es que los tres equipos vienen con una funda TPU transparente de fábrica, lo cual ayuda mucho al grip, a proteger de golpes y rayones las carcasas. Una sana costumbre de motorola en los últimos 2 o 3 años.

Por el tamaño de los terminales, la espalda de los celulares no es ya tan “cómoda” para desbloquear los equipos. Por ello, el G22 y G82 hacen gala de un sensor de huellas montado en el botón de power del equipo. En el caso del Edge 30, el sensor está montado debajo de la pantalla AMOLED, solución vista ya desde el Edge original.

Acá está una de las mayores diferencias entre los 3. Si bien el G22 no es Full HD, al menos usaron un panel IPS con tasa de refresco de 90Hz que se ve muy bien.

El G82 hace gala de una pantalla OLED con tasa de refresco máxima de 120Hz que se ve vibrante.

Y me detengo de vuelta en el Edge 30 porque la pantalla de 6.5 pulgadas con tecnología AMOLED y soporte HDR10+, con tasa de refresco de 144Hz… GLO-RIO-SA. Los colores son vibrantes con un nivel de nitidez y contraste hermoso.

Motorola acá fue un poco más conservador que en los hermanos mayores, presuponemos para mantener los costos bajo control.

En el G22 pusieron un Mediatek Helio G37 que consiste en 4 núcleos Cortex A53 a 2.3Ghz y 4 Cortex A53 a 1.8Ghz.

EL G82 es un “clase media” hecho y derecho usando un Snapdragon 695 5G, uno de los SoC de rango medio de Qualcomm del momento, que usa una arquitectura de dos niveles con 2 procesadores Kyro 660 Gold basado en Cortex A78 a 2.2Ghz, y seis procesadores Kyro 660 Silver basado en Cortex A55 a 1.7Ghz.

El Edge 30 es más “mundano” comparado con el Pro (que utiliza un Snapdragon 778G+ 5G), en este caso es un Octa-Core que usa un procesador Cortex A78 a 2.5Ghz, 3 procesadores Cortex A78 a 2.4Ghz, y cuatro procesadores Cortex A55 a 1.9Ghz.

Si bien el G22 es el más humilde en términos de desempeño, en el día a día los tres teléfonos corren lo que le tiren sin problema. Ojo, no le pidan milagros tampoco: funciona bien pero comparado con el G82 y el Edge 30 está bastante atrás. Si quieren algo más rápido por poca plata, vayan al G52 que ya revisamos hace un tiempo.

El rendimiento diario no presenta fisuras, los 8 procesadores nos brindan una experiencia fluida con todo lo referido al uso diario de un Smartphone. Todas las aplicaciones responden bien y en ello colabora los saludables 4GB de RAM del G22, los 6GB del G82 y los 8GB de RAM en el caso del Edge 30.

Los GPU nos interesan porque somos [IRROMPIBLES] y los fichines están dentro de nuestro ADN. El G52 un PowerVR G8320 que rinde excepcionalmente bien con la pantalla 720p, mientras que el G82 usa el Adreno 619 que no desentona con su rango de producto. El Edge usa un Adreno 642L que tiene un rendimiento por sobre la media, bajo cualquier carga, y la pantalla OLED colabora con un nivel de calidad pasmoso.

Los GPU están bien dimensionados en todos los casos. Hemos jugado Asphalt 9, Call of Duty Mobile, PUBG, Fallout Shelter, Monument Valley 1 y 2 y la experiencia fue muy buena todos, (aunque en el G22 tuvimos que bajar un poco la calidad para que no haya mucha caída de cuadros).

Hoy en día, cualquier teléfono de gama media hace gala de al menos dos cámaras traseras con diversas funciones. En este caso, cada uno de los tres exponentes brindan algo diferente.

El G22 tiene un sensor primario monstruoso de 50 Megapíxeles Quad Pixel (o sea, usa 4 pixeles en 1, lo cual da fotos de 12 Megapíxeles finales). Luego hay un sensor de 8Mpx para tomas Ultrawide, uno de 2Mpx para fotografía Macro y uno de 2Mpx que es sensor de profundidad Bokeh. La cámara de selfies es de 16Megapixeles

Los 50Mpx rinden sus frutos con imágenes muy definidas con un excelente balance de color y rango dinámico. El night mode de noche ayuda muchísimo con el rango dinámico logrando fotos nocturnas muy buenas. La cámara Ultrawide en cambio tiene imágenes con poco nivel de detalle, producto de un sensor de solo 8Mpx, aunque el HDR ayuda a que el balanceo de contraste y color sea adecuado.

El G82 hace gala de un sensor 50 Megapíxeles Quad Pixel (o sea, usa 4 pixeles en 1, lo cual da fotos de 12 Megapíxeles finales). Luego hay un sensor de 8Mpx, para tomas Ultrawide, y uno de 2Mpx para fotografía Macro. La cámara de selfies es de 16Megapixeles

Las fotos por defecto en 12Mpx del sensor principal tiene buen detalle y balanceo de color con bajo ruido. El contraste es apropiado y el rango dinámico es normal. Motorola hizo un buen trabajo en la optimización de la cámara. En el modo nocturno, tenemos buenas imágenes con el sensor principal, con gran rango dinámico. El modo night visión ayuda a tener un poco más de calidad en las tomas nocturnas.

Las tomas con la cámara ultrawide sobresalen a la media, con buen nivel de detalle, bajo ruido y buen rango dinámico. La única contra es que, teniendo en cuenta su rango de precio, no podemos dejar de mencionar que el G82 NO filma en 4K

Finalmente tenemos el Edge 30, que hereda del 30 Pro un curioso arreglo de sensores de 50Mpx duales, para el wide y el ultrawide.

El sensor primario usa el arreglo de Quad Pixel, con lo cual las fotos por defecto son de 12.5Mpx. La cámara ultrawide también es de 50Mpx también en formato Quad Pixel. Y cerramos con un sensor de profundidad de 2Mpx.

Lejos la cámara del Edge es superior en todo aspecto, contrastes y rango dinámicos excelentes, colores fieles, fotos sin ruido, HDR ajustado por Motorola que da imágenes vibrantes… todo es positivo. Las fotos ultrawide no se quedan atrás, con un contraste y rango dinámico perfecto. Y para la noche, el night mode ayuda muchísimo con el rango dinámico, logrando fotos muy buenas con el lente principal. Lo que pierde versus el Pro es la filmación en 8K.

También, lo que perdió respecto de su hermano mayor es que la cámara de selfies es de 32Mpx, aunque no es tan grave, porque incluso puede seguir filmando en 4K.

Motorola sigue subiendo la vara del almacenamiento año tras año y los tres modelos poseen 128GB de memoria Flash.

Sin grandes cambios en los últimos tiempos el G22 y el G82, tienen una bestial batería de 5000mAh, mientras que el Edge 30 tiene una de 4020mAh (ser un celular delgado tiene un costo). Sumado a procesadores sumamente eficientes, redundan en una vida media de dos días. Usándolo de forma intensa, jugando o viendo video a pantalla completa, tuvimos más de 12 horas de autonomía, lo cual es un numero brillante.

Para la recarga, el G22 Plus utiliza un cargador rápido de 15W, que nos lleva de 0 a 100% en dos horas y media. En el caso del G82, el cargador es de 30W,  bajando el anterior tiempo a la mitad. Finalmente, el Edge mete un cargador rápido de 33W, que demora una hora en cargar de cero a full.

Finalmente todos los teléfonos probados soportan todas las normas más modernas de conectividad inalámbrica como ser WiFi dual band (el Edge soportan la nueva norma 6E), Bluetooth 5.0 (5.1 en el G82 y 5.2 en el Edge) y soporte NFC y eso nos pone felices.

Se nos fue otra review triple y surge la pregunta ¿Qué teléfono comprar? Vamos por los precios. El Moto G22 se vende oficialmente en la web de Motorola a $46.999 pesos, mientras que el G82 se vende a $73.999. Por último, Edge 30 se vende a $89.999, la mitad que su hermano mayor, el 30 Pro.

En este caso, en lo personal prefiero el Edge 30,  principalmente por la cámara principal, la delgadez, y la pantalla. Incluso el precio que es mejor que un G200, aunque las prestaciones del G200 son superlativas por usar un SoC de alta gama.

De manera que, en este caso, la elección recae en sus necesidades y la profundidad de sus billeteras. Lo que es claro es que ninguno de estos equipos los decepcionará puesto que Motorola hace un gran trabajo en mantener su calidad.

Nota: Agradecemos a Burson, Cohn y Wolfe y Motorola por prestarnos los terminales para la review.

¡ATENCIÓN! ¡SE VIENE UN REGALAZO! ¡Estén atentos a nuestro Instagram @irrompibles ! ¡Gracias a los amigos de Motorola Argentina, vamos a estar regalando un genial teléfono celular: un MOTO e32!

El Ing. Pablo Salaberri, alias Pablitus, es egresado de la Universidad Abierta Interamericana y honorabilísimo Director de Tecnología de [IRROMPIBLES]. Lo encuentran en el Twitter a menudo en modo Jedi (pero no siempre).

El Ing. Pablo Salaberri, alias Pablitus, es egresado de la Universidad Abierta Interamericana y honorabilísimo Director de Tecnología de [IRROMPIBLES]. Lo encuentran en el Twitter a menudo en modo Jedi (pero no siempre).

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